Apple ha podido centrar mucha atención en los nuevos M1 Pro y M1 Max, lo cual es notable. A lo largo de la presentación, solo hemos escuchado declaraciones como: “cuatro veces más rápido”, “doble rendimiento” y similares. Ahora que estos procesadores han sido lanzados, comienzan a aparecer evaluaciones preliminares de ellos.
Con M1 Max rendimiento impresionante para las computadoras más profesionales
Si comparamos el nuevo MacBook Pro de 14 y 16 pulgadas con la versión anterior, la presencia de Apple Silicon arroja resultados impresionantes. Si bien me viene a la mente la imagen de velocidad de la invitación al evento Unleashed, encontramos que las pruebas de Geekbench 5 revelan que con el M1 Max, el MacBook Pro de 16 pulgadas es un 181% más rápido en gráficos que el modelo anterior.
La comparación se establece frente al MacBook Pro de 16 pulgadas con procesador Intel y AMD Radeon Pro 5300M. Esta máquina puntúa “solo” 24.461 en la prueba Geekbench 5 Metal, mientras que la nueva MacBook Pro con M1 Max y 64GB de RAM según nuestros cálculos el modelo de 24 núcleos, no el de 32 núcleos alcanza 68.870 puntos, una mejora, ya que hemos dicho, del 181%. El M1 Max supera significativamente al AMD Radeon Pro 5600 en términos de velocidad de procesamiento de gráficos, logrando un aumento del 62% con respecto al modelo anterior.
Puntuaciones como esta ponen a la nueva MacBook Pro con procesador M1 Max a la par con la iMac Pro ahora descontinuada. Una computadora, recordemos, que venía con una AMD Radeon Pro Vega 56, una tarjeta gráfica más que considerable.
La magia de los SoC: escalabilidad inigualable
Los nuevos M1 Pro y M1 Max de Apple han sido fantásticos. SoC que, comenzando con el M1, aumentan progresivamente el número de núcleos de procesamiento y GPU para escalar linealmente el rendimiento. Esta es la característica especial de un System on Chip, que le permite controlar la cantidad de núcleos y agregar nuevos componentes según las necesidades.
También es posible agregar nuevos núcleos, hasta 32 núcleos GPU, por ejemplo, y aumentar la potencia en consecuencia debido a este diseño y al excelente trabajo que Apple ya ha hecho con núcleos únicos en el M1. No solo eso, sino que el diseño térmico mejorado y el hecho de que el M1 Max funciona con un TDP de 30 W, el doble que el del M1, les permite ofrecer cifras de rendimiento realmente excepcionales.
Estamos entusiasmados con la perspectiva de nuevas tecnologías, pero esperaremos la llegada de los futuros procesadores M2, que deberían llegar esta primavera y se construirán en una arquitectura de más de 5 nm, con mejor rendimiento y eficiencia energética. A partir del M2, se prevé que Apple fabricará varias versiones según la cantidad de energía y el diseño térmico de las máquinas en las que se instalarán.